El más grande y robusto de los aguiluchos que se pueden ver en la península. La hembra puede tener una envergadura alar de 120 cms, siendo el macho un poco más `pequeño. Su vuelo lento y divagante, con alas anchas en forma de V poco pronunciada y la cola larga, lo hacen inconfundible. A diferencia de los otros dos tipos de aguiluchos (cenizo y pálido) no tiene obispillo blanco.
El macho tiene cola y secundarias de color gris, en contraste con el color pardo oscuro del resto del cuerpo. Adquiere el plumaje de adulto a los 3-4 años.
La hembra es de color marrón oscuro, con la cabeza y los hombros muy claros.
Los jóvenes tienen un intenso marrón chocolate y marcas cefálicas ocre rojizo.
El macho en celo (abril y mayo) realiza vistosos picados y piruetas desde gran altura.
Está estrechamente ligado a lagunas con grandes masas de carrizo.
En la península existe una población residente y reproductora en zonas del valle del Ebro, las dos Castillas y Andalucía occidental. También se pueden ver invernantes y en paso migratorio.
Macho
Hembra